"Con ZP estamos igual que con Aznar".Izar-Puerto Real envía su primer mensaje al PSOE.

- Noria "Parece que Europa ha parado la contratación por no pagar la multa" - Sevilla avisa de una regulación en ocho meses - Los sindicatos reclaman más tiempo a Monti PUERTO REAL. "Con ZP estamos igual que con Aznar".Éste era el comentario más generalizado ayer en las inmediaciones del puente José León de Carranza. Y es que los trabajadores de Izar-Puerto Real se han cansado de esperar a que el nuevo Gobierno del PSOE empiece a cumplir las promesas que anunció en la campaña electoral. Ayer, casi 2.000 operarios de la factoría puertorrealeña celebraban una asamblea a las doce del mediodía en la que decidían volver a salir a la carretera. Es la primera movilización tras el cambio del Ejecutivo en Madrid, después de que el 11 de marzo los operarios optasen por variar el signo de su reivindicación en apoyo a las víctimas de los atentados. Desde entonces se habían decidido a dar un margen a los nuevos gobernantes, espera que parece haber llegado a su fin después de que el comité de empresa de Izar-Puerto Real manifestara ayer sus recelos por una posible "maniobra" del Ministerio de Economía. Sobre la carretera, el presidente del comité de empresa, Ramón Linares, aseguró que el objetivo de la protesta era "mostrar nuestro rechazo ante el temor de que el Ministerio de Economía haya decidido no contratar carga de trabajo hasta culminar el plan de futuro que tiene que presentar. Si es así la decisión, estaríamos en un escenario muy parecido al de meses anteriores con el Gobierno del PP". A su juicio, la actual situación es muy parecida a otras nunca deseadas: "la política de diques vacíos para justificar una política dura de reajuste". Como afirmó Linares, la movilización de ayer no fue más que una primera señal "de que los trabajadores no estamos dispuestos a afrontar un plan de futuro si no tenemos carga de trabajo en los astilleros civiles". Además, dejó claro que si el nuevo Gobierno opta por los planteamientos ya reiterados por los sindicatos y, según Linares, "a los que el PSOE se comprometió en las elecciones a defender para conseguir primero carga de trabajo y después un plan de futuro, estaremos en nuestro sitio. Pero si no es así, estaremos en una confrontación bastante dura". Como ya ocurrió en otras ocasiones, el corte del tráfico en el puente Carranza se produjo incluso antes de que los operarios ocuparan la N-443. Sobre el asfalto, comenzaba una particular sentada sobre los bloques que adornan la calzada. Sólo minutos después de comprobar que por allí no circulaba ningún vehículo se produjo la ocupación. Para sorpresa de muchos, en las inmediaciones de la torreta de control del puente aparecía una decena de furgones de la Policía antidisturbios. Incluso algunos trabajadores bromearon: "Ahora bajan más rápido que con el PP". El comentario se producía ante el hecho de que, a medida que un grupo de operarios subía el puente, los furgones no dudaron en avanzar, provocando incredulidad incluso al presidente del comité de empresa. "Es típico y obligatorio de los gobiernos, que cuando hay movilización de los trabajadores, intenten reprimirlas", afirmó. El corte de tráfico duró aproximadamente una hora y provocó importantes retenciones a lo largo de toda la Bahía. Linares aseguró que el ánimo entre los trabajadores es de nerviosismo y frustración "porque en las últimas semanas se ha producido un bombardeo de elementos que distorsionan la posible salida de futuro, todavía no hemos visto noticias positivas desde que se creó la comisión interministerial". Por último, el representante sindical volvió a insistir en que, lo único que piden al nuevo Gobierno socialista, es "llevar a cabo esa apuesta decidida que tenían hace dos meses". La acción de ayer fue aislada en la factoría de Puerto Real, si bien Linares no descartó que en los próximos días se sumen a las protestas las fábricas de Sestao o Juliana. La próxima semana volverán las asambleas.