A partir del 1 de julio de 2025, Finlandia ha prohibido que los buques de carga descarguen aguas residuales de inodoros, lodos de depuración y agua de lavado sulfúrica en las aguas costeras del país.
Esta medida ha convertido a Finlandia en el primer país en imponer este tipo de normativa sobre aguas residuales marítimas.
La ley fue aprobada por el Parlamento finlandés en diciembre de 2024.
Los buques de pasajeros estuvieron sujetos a tales restricciones durante muchos años, pero esta es la primera vez que también se incluyen los buques de carga.
La legislación considera los vertidos que contribuyen directamente a la contaminación marina. Las aguas residuales de los inodoros contienen una gran cantidad de bacterias intestinales, sólidos y nutrientes, lo que favorece la eutrofización.
Es un proceso que agota el oxígeno en los ambientes marinos y conduce al crecimiento de algas dañinas.
A pesar de la prohibición, la ley incluye períodos de transición. Las aguas grises de duchas y lavabos podrán seguir vertiéndose en aguas de Finniah durante cinco años más.
Todo tipo de aguas residuales pueden ser vertidas legalmente fuera de las aguas territoriales de Finlandia.
Según las autoridades medioambientales, la nueva normativa supone un paso vital para proteger el Mar Báltico, que sufre una contaminación crónica por nutrientes, mientras que la eutrofización es una de las amenazas ecológicas más graves de la región.
Referencias: AA News, Helsinki Times
