Las instituciones no cuestionan los ´party boats´ tras la muerte de un turista

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El catamarán en el que viajaba la víctima cumplía todos los requisitos legales, según Capitanía Marítima

25.06.2014 | 09:26

El barco donde ocurrieron los hechos, frente a Cala Tarida, poco después de llegar la lancha de la Guardia Civil.
El barco donde ocurrieron los hechos, frente a Cala Tarida, poco después de llegar la lancha de la Guardia Civil. IBIZA PRODUCCIONES
 

n. g. g. / j. ll. f. | ibiza

Las instituciones de las Pitiusas y de Balears lamentaron ayer la muerte de un turista a bordo de un 'party boat' en Cala Tarida, pero no consideraron que este suceso merezca una revisión de la estrategia de control de los barcos-discoteca y, mucho menos, plantear su prohibición. Tanto la delegada del Gobierno en Balears, Teresa Palmer, como el director general de Puertos y Aeropuertos del Govern, Antonio Deudero, y la alcaldesa de Sant Josep, Neus Marí, afirmaron que la responsabilidad de los party boats es siempre del patrón de cada embarcación.

Deudero llegó a afirmar incluso que «no porque una actividad represente un peligro para la vida de las personas tiene que prohibirse» .

Mientras el caso desataba ayer una gran controversia en el conjunto de Balears, comenzaron las investigaciones policiales y judiciales para esclarecer las circunstancias exactas que rodearon el fallecimiento del pasajero del ´Passion Cat´, un catamarán con base en el puerto de Sant Antoni.

Al parecer, el turista se había sumergido para intentar coger una escalera del party boat en el que viajaba y que, al parecer, había caído al agua, informó ayer un portavoz de la Guardia Civil, que agregó que cuando subía a la superficie, perdió el conocimiento y ya no logró salir. El fallecido, Przemyslaw Jarema, polaco residente en el Reino Unido de 36 años, iba al menos con su novia, según los investigadores, en el ´Passion Cat´, donde había a bordo unas 60 personas.

En la zona de Cala Tarida, parte del pasaje se lanzó al agua para bañarse, entre ellos estaría Jarema, y fue entonces cuando la escalera del barco se cayó y se sumergió. «Él quiso recogerla. Dijo: ´´Voy a por ella´´ y bajó hasta el fondo. Después, cuando subía, se ve que perdió el conocimiento», apuntó un portavoz del instituto armado.

De acuerdo con la información publicada ayer, sus acompañantes dieron la voz de alarma al percatarse de que no regresaba y la tripulación alertó a Emergencias.

La Guardia Civil recibió el aviso del 112 a las 19.50 horas y al lugar se desplazaron los miembros del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), quienes localizaron el cuerpo de Jarema sobre las 22.30 horas. A continuación lo trasladaron a tierra, donde a las 23.50 horas se realizó el levantamiento del cadáver.

Aunque se había apuntado que el suceso podría estar relacionado con la ingesta de alcohol y drogas por parte de la víctima, el citado portavoz del instituto armado señaló que «habrá que esperar a la autopsia» para determinarlo. Un examen preliminar del forense confirmó que la muerte se produjo por ahogamiento.

El Capitán Marítimo de Ibiza y Formentera, Luis Gascón, afirmó que la embarcación escenario de los hechos no incumplía «ningún aspecto grave que tenga que ver con las competencias de Marina Mercante». «Cumplía con el aforo, la tripulación estaba en regla y tenía elementos de salvamento», añadió. «No apreciamos nada grave que tenga una relación de causa-efecto en el barco», dijo el Capitán Marítimo, que durante toda la mañana de ayer permaneció en contacto con otras autoridades a raíz de este hecho.

Luis Gascón añadió: «Lo que ha pasado subraya la importancia de la actuación de los propietarios del barco. Los familiares [del fallecido] buscarán cualquier cosa para ir contra el patrón y el armador».

COMENTRIOS DE AEMC

En estos casos, es preferible no incurrir en la frivolidad.

¿Qué significa cumplir con el aforo?

¿Qué significa que disponía de los medios de salvamento?

¿Cuántas personas se encontaban a bordo del barquito en el momento del accidente?

¿Qué tipo de actividad es la que desarrollan esos barquitos?

Estas  otras muchas preguntas deberían encontrar una respuesta seria por parte de la Capitanía Marítima y sus superiores.

En el probable supuesto de consumo masivo de drogas y bebidas alcoholicas, ¿Está obligado el patrón del barco a permanecer de brazos cruzados?

 

Antecedentes

 

El ´Mojo´ carecía de licencia para el transporte marítimo de pasajeros

08.09.2013 | 05:30

v. t. | ibizaEl ´Mojo´, que pasará a la historia por ser el primer barco-discoteca en el que se detiene una fiesta en el mar, no contaba con la licencia de transporte marítimo de pasajeros e incumplía las medidas de seguridad que se exigen a las embarcaciones clasificadas en la lista sexta. «Es un barco privado que no tiene autorización para realizar el tipo de actividad que estaba desarrollando. Los barcos de recreo están exentos de despacho de buques, a no ser que quieran dedicarse a una actividad comercial, como es el caso», indicó el capitán marítimo en funciones, Luis Gascón. El capitán apuntó que esta situación podría ser un «agravio comparativo» para los demás buques de las Pitiusas que sí cumplen con la normativa y que se ven obligados a «justificar los certificados pertinentes», en relación al caso del ´Mojo´. Gascón aseguró que esta embarcación, si desea realizar este tipo de actividad comercial, necesita ser incluida en la lista sexta, igual que lo hacen todas las golondrinas de Balears, según el Real Decreto 1435/2010, que regula el abanderamiento y matriculación de las embarcaciones de recreo en las listas sexta y séptima del registro de matrícula de buques. El ´Mojo´ tampoco cumplía con las medidas de seguridad que se exigen a los buques para realizar este tipo de actividades económicas. Además, Gascón apuntó que el barco también debe obtener el permiso de la Comunitat Autònoma, que regula los chárter y lo relacionado en materia de alquileres, una acreditación de la que tampoco disponía. Además de la Guardia Civil, en la operación también intervinieron la Policía Local de Sant Antoni y el Servicio de Vigilancia Aduanera, aunque se desconoce qué irregularidades estaba cometiendo al respecto el barco en el momento del operativo.