En el fondo de la bahía de Baiona, a tan solo unos 3 metros de profundidad y a 50 del paseo de Elduayen duerme un barco del siglo XVI. Es el último descubrimiento en la zona del arqueólogo y submarinista Miguel San Claudio Santa Cruz, que dirige la empresa Archeonáutica. Su equipo, que en el 2008 sacó del fondo de la ensenada uno de los yacimientos submarinos más importantes de Galicia, ha sido también el responsable de realizar los sondeos previos que encargó Portos de Galicia para planificar el plan de reordenación del puerto de la villa y el traslado de La Pinta.
La prospección realizada en una zona de 2.000 metros cuadrados dio como resultado el hallazgo de tres pecios, aunque dos de ellos eran chalanas sin antigüedad o valor. Sin embargo, medio enterrada en la arena, el equipo de Archeonáutica ha encontrado los restos de una interesante embarcación. El experto confirma la importancia del hallazgo. «Si llega a haber sido en otro país, estarían tirando bombas de palenque. En este pasa desapercibido, pero en cualquier otro, habría sido muy relevante y estudiado», manifiesta Miguel San Claudio advirtiendo del potencial que Galicia sigue escondiendo en el fondo de sus mares.
El estado de conservación del barco es «excepcional, magnífico», apunta el experto. Indica que, en cualquier caso, habría que hacer un estudio de la embarcación en condiciones para poder hablar en profundidad y no solo de esta nave. «Lo bueno es que no se trata solo de ampliar conocimientos sobre la historia de Baiona, sino que se puede vincular con la historia general de la humanidad. Todos estos barcos hundidos con objetos móviles arqueológicos», resalta.
Los datos que aporta «son siempre estimativos a expensas de ese estudio que merecería». De ese primer sondeo, consideran que la embarcación pertenece al siglo XVI y que tiene una eslora de unos 13 metros. En las imágenes que han conseguido capturar ya que la bahía de Baiona está llena de fangos que restan visibilidad, se distinguen las cuadernas, las tracas y otros elementos de la nave. Parte de la embarcación está enterrada. La localización de cientos de piezas de cerámica en las proximidades del paseo marítimo, entre la playa de A Ribeira y el pantalán de la réplica de la carabela La Pinta, posibilitaron afinar la cronología.
La riqueza del patrimonio submarino local tiene explicación. «Era, con el de A Coruña, el puerto mejor defendido de la fachada atlántica, aparte del de Lisboa, por eso aparecen tantas cosas. Frente a Baiona discurrió casi toda la historia de la humanidad», defiende. Indica que en la zona hay gran cantidad de naufragios documentados. El área más rica es la de Silleiro, Estelas y Cíes.