MSC se posiciona para liderar el crecimiento global de flotas, según las últimas proyecciones de Sea-Intelligence

 

 

 

 

Sea-Intelligence ha señalado las limitaciones del método común utilizado para pronosticar el tamaño futuro de las flotas de las líneas navieras. Tradicionalmente, los analistas suman simplemente el tamaño actual de la flota al libro de pedidos, ignorando factores como las transacciones en el mercado de segunda mano y los cambios en el uso de buques fletados.

Un enfoque más exhaustivo, según Sea-Intelligence, consistiría en examinar las estrategias de ajuste de flota de las líneas navieras individuales en los últimos años. Al considerar cómo han gestionado sus flotas, se puede prever de manera más precisa el tamaño futuro de estas, suponiendo que mantengan una consistencia en sus estrategias.

El análisis de Sea-Intelligence señala que, utilizando el enfoque simplista para predecir los tamaños de las flotas, a menudo se sobrestiman los crecimientos reales. Esto indica que, al adquirir nuevos buques, la mayoría de los transportistas también reduce la capacidad de su flota mediante la venta de tonelaje propio en el mercado de segunda mano o la terminación de acuerdos de fletamento.

 

El gráfico muestra los tamaños de flota estimados para abril de 2026 utilizando tanto un método simple como uno ajustado. El enfoque ajustado toma en cuenta las estrategias de tonelaje actuales y asume que las mismas estrategias empleadas en los últimos dos años continuarán durante los próximos dos años.

 

Según las proyecciones de Sea-Intelligence, se espera que MSC incremente significativamente su tamaño de flota, consolidando su posición como el transportista más grande del mundo, superando a CMA CGM, que se proyecta ascenderá al segundo lugar. Este cambio en las clasificaciones desplazaría a Maersk al tercer lugar.

Hapag-Lloyd ha revelado su nueva estrategia hacia 2030, que incluye el objetivo de permanecer entre los cinco principales transportistas. Sin embargo, Sea-Intelligence advierte que alcanzar este objetivo podría requerir un cambio de enfoque respecto a los últimos dos años, de lo contrario, Hapag-Lloyd corre el riesgo de caer al sexto lugar, detrás de ONE.