EL MUSEL DE LA ETAPA PALAO.- REXACH OCULTA AL CONSEJO DE EL MUSEL LA MARCHA DE LA LÍNEA DE SUARDÍAZ A SANTANDER

 

                                                                                 FERNANDO PALAO

 

 

El presidente de Cesintra sostiene que la línea falló por las numerosas escalas, que hacían que el camión llegara antes a Inglaterra «remando»   R. V. / M. C.                                                                                                                            

El presidente de la Autoridad Portuaria de Gijón, Fernando Menéndez Rexach, ha ocultado al consejo de administración del Puerto la supresión de la línea de embarque de vehículos («ro-ro») de Vapores Suardíaz, tras un año sin haber logrado captar clientes en el puerto gijonés. La última escala tuvo lugar el pasado 1 de enero. Desde entonces no se esperaba ninguna otra escala de los barcos de Suardíaz, pese a lo cual no se informó de ese asunto en el consejo de administración de la Autoridad Portuaria, que se celebró el jueves de la semana pasada, denunciaron ayer consejeros del puerto.   El sigilo con el que la Autoridad Portuaria ha tratado el final de la línea de Suardíaz contrasta con el despliegue con el que presentó el embarque de cinco camiones y 35 coches en enero del año pasado. El embarque por El Musel de coches de la factoría de Renault en Valladolid fue presentado en su día como un hito histórico. La realidad era otra. El grupo Suardíaz (que gestiona el Puerto Seco de El Musel en Palencia) y la Autoridad Portuaria habían planteado mantener la línea un año, después de que la naviera de Luis de la Peña (ex consejero delegado de Suardíaz, que había dejado el grupo enfrentado con Juan Riva) arrebatase a Suardíaz el transporte de los coches de la factoría de Citroën en Vigo. La escala en Gijón fue una de las alternativas para ocupar sus barcos.   El problema es que no había ocupación. Aparte de los transportes especiales y camiones del viaje inaugural, cargados el 7 de enero de 2005, no se logró embarcar ninguna otra mercancía. Sólo algunos vehículos de Renault que, para mantener una cierta ocupación, Suardíaz desvió de su embarque habitual en el puerto de Santander a El Musel. Ahora, los cientos de coches que se embarcaban por el puerto gijonés volverán a los muelles cántabros, por los que pasan decenas de miles de vehículos al año, explicaron fuentes del sector.   El desenlace final de la línea «ro-ro» de Suardíaz no ha sido ninguna sorpresa. El pasado 23 de septiembre el jefe de su flota, Juan Riva Francos, anunció en Gijón que la línea iba a pasar a tener una periodicidad mensual (comenzó con escalas semanales, luego quincenales y finalmente mensuales hasta desaparecer) y que el grupo estaba estudiando su continuidad.   La página web del grupo Suardíaz ya ha excluido al puerto de Gijón en la línea que denomina «Atlántico». Su lugar ha pasado a estar ocupado por el puerto de Santander, que ha pasado a estar conectado con los puertos de Holanda, Bélgica, Inglaterra, España peninsular, Portugal, Marruecos y Canarias que antes estaban unidos a Gijón. Mientras, la Autoridad Portuaria de Gijón sigue ofreciendo en su página web la línea de Suardíaz, como semanal y con escala en Gijón.   Para Enrique Riaño, presidente de Cesintra, el fracaso de la línea era más que evidente «porque no la pedía el mercado, ni los clientes, ni nadie. Simplemente Suardíaz había perdido por esas fechas su contrato con Vigo y desde la Autoridad Portuaria se le daba cobijo con una línea que no demandaba el mercado». El presidente de Cesintra denuncia unas prácticas que «perjudican la imagen pública y el buen nombre del puerto de Gijón y tienen un coste económico porque son líneas subvencionadas. ¿Quién se hace ahora responsable de esto?».   Riaño, tras recordar que la naviera potencia desde los puertos de Santander y Bilbao líneas con Inglaterra, explica que «los transportistas nos montaríamos en una línea que nos llevara directos a Inglaterra de noche, pero no en una que hace paradas aquí y allí. Llega antes el camión remando».