La Autoridad Australiana de Seguridad Marítima (AMSA) ha publicado un resumen de las lecciones de seguridad aprendidas de un incidente en el que un buque comercial nacional sufrió un incendio a bordo causado por un evento de fuga térmica que involucró un sistema de batería de iones de litio.
Descripción general
Se produjo una explosión en un barco pesquero fletado mientras estaba atracado. La investigación identificó que la fuente de ignición era una batería de iones de litio que no mantenía la carga conectada a un cargador de batería de manera que eludía el sistema de seguridad de gestión de la batería.
La embarcación no tenía posibilidad de reparación tras la explosión.
Qué pasó
A las 23:30 horas del día del siniestro, un barco pesquero atracado experimentó una explosión. La fuerza de la explosión esparció los escombros hasta 30 metros y expulsó un cabrestante de cubierta de 200 kg y una sección de cubierta, que quedó en reposo en la popa del barco.
AMSA dijo que, si bien había evidencia de humo e incendio, la destrucción fue causada por la propia explosión.
El propietario de la embarcación informó anteriormente haber tenido problemas con el sistema de batería de litio conectado al cabrestante a bordo. Habían comprado un nuevo cargador y servicios de instalación a un electricista de automóviles la tarde del incidente.
El electricista estaba trabajando en la embarcación e instalando temporalmente el nuevo cargador en el sistema para dejarlo cargando durante la noche. El electricista afirmó que abandonaron el barco aproximadamente a las 19:30 y configuraron el cargador poco antes de la salida.
La explosión se produjo durante la noche y mientras el buque se encontraba atracado. Afortunadamente no había nadie a bordo en ese momento y no hubo heridos.
Sin embargo, se consideró que el barco en sí no podía repararse.
Hallazgos de la investigación
AMSA dijo que, aunque la magnitud de los daños hacía que las conclusiones sobre la explosión fueran problemáticas, parece que la instalación del nuevo sistema de carga de baterías potencialmente pasó por alto el sistema de gestión de baterías.
También se observó que la ubicación de la instalación de la batería de iones de litio no estaba ventilada como exigen las normas australianas.
Mensaje de seguridad
Los propietarios/operadores de embarcaciones deberían desarrollar e implementar un procedimiento para la carga a bordo de dispositivos electrónicos y sistemas de baterías. Esto debería considerar el riesgo de una fuga térmica, incluida la ventilación de gases y compuestos tóxicos e inflamables.
Cuando una batería de iones de litio sufre un descontrol térmico, se produce una intensa liberación de calor y gases tóxicos, algunos de los cuales también son explosivos. Este tipo de eventos de descontrol térmico también pueden provocar incendios que son extremadamente difíciles de extinguir.
Las baterías de iones de litio deben instalarse de acuerdo con la Subsección Eléctrica C5B de la Norma Nacional para Embarcaciones Comerciales.
AMSA agregó que es esencial que las instalaciones de baterías de iones de litio incluyan un sistema de gestión de baterías aprobado para evitar posibles eventos de sobrecarga. Los flujos de aire de ventilación también deben cumplir con las especificaciones del fabricante.