Nuevo ataque reportado en el Golfo de Adén
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- Category: Seguridad marítima
- Published on Saturday, 20 July 2024 20:19
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La empresa de seguridad marítima Ambrey identificó el buque como un portacontenedores con bandera de Singapur. El barco estaba navegando hacia el noreste a lo largo del Golfo de Adén cuando un buque mercante cercano observó una "luz y una explosión" en la ubicación del barco. El aviso señaló que el barco pareció realizar maniobras evasivas de inmediato y apagó su sistema de identificación automática aproximadamente una hora después. Ambrey evaluó el buque para alinearse con el perfil del objetivo hutí.
El portavoz hutí, Yahya Sare'e, dijo que el grupo atacó al Lobivia en el Golfo de Adén "debido a que la compañía propietaria del mismo violó la decisión de prohibir la entrada a los puertos de la Palestina ocupada".
Los datos de Equasis muestran que el Lobivia es propiedad de Singapur y está operado desde allí. Los datos de AIS muestran que el barco navega desde Yibuti hasta Berbera, Somalia.
La Autoridad Marítima y Portuaria de Singapur dijo que el gerente del portacontenedores Lobivia le informó que el buque había sido alcanzado por proyectiles no identificados mientras transitaba por el Golfo de Adén. El incendio resultante a bordo fue extinguido por la tripulación y no se reportaron heridos. La Autoridad Marítima y Portuaria dijo que el barco llegó al puerto de Berbera, Somalia, por su propia propulsión para evaluar los daños y realizar las reparaciones.
En noticias relacionadas, los hutíes respaldados por Irán se atribuyeron la responsabilidad de un ataque con aviones no tripulados de largo alcance en Tel Aviv el viernes, que aparentemente resultó en al menos una persona muerta y cuatro heridas.
Desde noviembre de 2023, los hutíes han llevado a cabo numerosos ataques con drones y misiles desde Yemen contra buques comerciales en solidaridad con los palestinos en Gaza. Estos ataques han obligado a una parte importante del comercio mundial a desviarse alrededor del Cabo de Buena Esperanza, lo que ha aumentado los costos de transporte y ha perturbado las cadenas de suministro mundiales. Hasta la fecha, el grupo ha secuestrado un barco, hundido dos y matado al menos a cuatro marineros civiles.